Buenaaaaaaaaaaas!!!!!! Aquí va otro capítulo de nuestra historia (ves Aki, si que lo he publicado! XD). Esta vez lo han escrito entre Quill y Javi.
Aquí os pongo el link de la sección de Escritura donde podréis encontrar todos los capítulos: http://rebelion-potterica.blogspot.com.es/search/label/Escritura.
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CAPÍTULO 10
- ¿Entonces lo sabes todo sobre ella?- dijo Mooney que se acercó a Aki hasta quedar casi pegada a ella. Sus ojos chispeaban de la emoción. Aki negó levemente con la cabeza.- Entonces no me sirve... ¿Pero estás bien?
- Pues sí.
- Ñe, tengo hambre. - las tripas de Javi emitieron un sonido tan fuerte que todos se dieron cuenta, con decisión avanzó hasta la puerta de piedra que había justo al lado de donde estaban hablando. Tras cruzarla se sentó a la sombra de un gran árbol.
El colegió donde estudiaban era un gran castillo que estaba situado en una zona oculta por las faldas de una montaña y entre los enormes árboles de 15 metros. Famoso antiguamente, hoy en día se utilizaba como centro académico de altas cualidades, pocos del país eran aceptados y por eso muchos no sabían ni que existía.
- ¿Sabéis qué? El otro día estaba pensando en cómo nos conocimos, pero resulta que no me acuerdo.- comentó Javi una vez que todas estuvieron sentadas sobre la hierba entre las raíces sobresalientes de un anciano árbol. Todas miraron a Javi durante unos instantes hasta que habló Vic.
- Yo te refrescaré la memoria: a principios del segundo curso conocí a Mooney, cuando acababa de llegar al colegio y andaba un poco perdida. – comenzó a explicar Vic mirando a Mooney. – Yo como soy tan buena persona y tan servicial pues la ayudé a integrarse y ya no pudo separarse de mi.– continuó entre risas. - No fue hasta tercero cuando nos conocimos todas a causa de un trabajo.
- Si, luego de eso nuestra amistad se fue formando tan pausadamente que ni nos dimos cuenta.- dijo Mooney que seguía con la mirada perdida, cosa que dejaba entrever que su mente seguía dándole vueltas a lo que le había pasado a su abuela.
- Hablando de pensar... Ayer soñé con un perro. - susurro Quill desde detrás de la espalda de Vic, hecho que provocó que todas se asustasen.
- ¿De dónde has salido tú? - grito Vic. – ¿Qué quieres, que me de un infarto?
- He estado aquí todo el rato...- respondió Quill.
- ¿Sigues dándole vueltas a eso?- preguntó Aki dejando salir suspiró. - Te digo que podía haber ido al bosque.
- Pero a ver… ¿de qué habláis? – dijo Vic con el ceño fruncido.
- Te digo yo que no estaba, cuando estábamos de vuelta al pueblo vi un collar y te juro que ponía Pierre.- refunfuñó Quill sentándose junto a las demás.- Javi Javi Javi Javi, cuéntalo tú.
- ¡¡Lo queréis contar ya!! – espetó Vic con una gran curiosidad. Javi miró a Quill y con un suspiro empezó a contar lo que tanto intrigaba a las demás.
- Pues resulta que íbamos por el camino, y entonces entre los árboles, Quill vio una cosa blanca como un conejo… -
- Tenía más cara de gato. – interrumpió Quill.
- Ahora que lo pienso… si… la verdad tenía cara de ga… - dijo Javi después de cavilar un rato.
- ¡Sigue contando la historia! – urgió Vic entre risas.
- Claro, claro, ¿en que estaba? ¡Ah sí! ¡El ganejo del camino! – exclamó Javi.
- ¿Ganejo del camino? – preguntó Quill enarcando una ceja.
- Pues… si, es que como no sabemos si era un conejo o un gato…- Javi se encogió de hombros y las chicas se rieron.
- Bueno, bueno, pero, ¡¿podrías proseguir la historia?!- replicó Mooney con impaciencia.
- Ay sí, lo siento, lo siento. Pues resulta que Quill y yo decidimos acercarnos, para verlo mejor. Pero cuando nos acercamos, el ganejo ya se había ido… Pero había algo más interesante aun… -.Javi sonrió misteriosamente, y estalló en carcajadas malévolas. Mooney tomó a Javi por los hombros y la zarandeó mientras le gritaba que continuara contando la historia.
- ¡Ahhhh! ¡Ya cálmate! ¡Que ya sigo contando! – gritó Javi mientras Quill, Vic y Akira se partían de risa.
- Más te vale – refunfuñó Mooney mientras se apartaba de la chica.
- Resulta que había un collar, que según Quill decía Pierre… - prosiguió Javi.
- No digas “según Quill”, estoy segurísima que decía Pierre. – dijo la aludida con el ceño fruncido.
- No lo sé… - dijo Javi mirándola.
-¡¿Pierre?! ¡Así se llama el perro de…! – exclamó Mooney dando saltitos.
- Samuel… - completó Aki.
Las chicas se miraron entre ellas con cierto nerviosismo. El collar de Pierre estaba tirado en el bosque… ¿quizás se le había perdido? ¿Se le había caído de repente? ¿O le había sucedido algo más… siniestro?
James carraspeó incomodo. Las chicas dieron un respingo y lo miraron sorprendidas. Habían olvidado por completo su presencia. Vic se puso de pie en un salto, seguida rápidamente por las demás chicas.
- Ehh… deberíamos ir a comer algo, ¿no te parece James? – dijo Vic con tono nervioso mirando al chico.
- Claro… - dijo James confundido.
Mooney estaba roja como un tomate y las chicas sentían que habían hablado demasiado. No sabían qué tan confiable podía ser el chico nuevo. No es que pensaran que fuera un agente de la FBI contratado por Samuel, pero perfectamente podría pregonar por toda la escuela lo que habían hablado. No era gran cosa, pero podría traerles más problemas con Samuel… y era lo que menos necesitaban en ese momento.
***Victoria Luna Potter***
- Pues sí.
- Ñe, tengo hambre. - las tripas de Javi emitieron un sonido tan fuerte que todos se dieron cuenta, con decisión avanzó hasta la puerta de piedra que había justo al lado de donde estaban hablando. Tras cruzarla se sentó a la sombra de un gran árbol.
El colegió donde estudiaban era un gran castillo que estaba situado en una zona oculta por las faldas de una montaña y entre los enormes árboles de 15 metros. Famoso antiguamente, hoy en día se utilizaba como centro académico de altas cualidades, pocos del país eran aceptados y por eso muchos no sabían ni que existía.
- ¿Sabéis qué? El otro día estaba pensando en cómo nos conocimos, pero resulta que no me acuerdo.- comentó Javi una vez que todas estuvieron sentadas sobre la hierba entre las raíces sobresalientes de un anciano árbol. Todas miraron a Javi durante unos instantes hasta que habló Vic.
- Yo te refrescaré la memoria: a principios del segundo curso conocí a Mooney, cuando acababa de llegar al colegio y andaba un poco perdida. – comenzó a explicar Vic mirando a Mooney. – Yo como soy tan buena persona y tan servicial pues la ayudé a integrarse y ya no pudo separarse de mi.– continuó entre risas. - No fue hasta tercero cuando nos conocimos todas a causa de un trabajo.
- Si, luego de eso nuestra amistad se fue formando tan pausadamente que ni nos dimos cuenta.- dijo Mooney que seguía con la mirada perdida, cosa que dejaba entrever que su mente seguía dándole vueltas a lo que le había pasado a su abuela.
- Hablando de pensar... Ayer soñé con un perro. - susurro Quill desde detrás de la espalda de Vic, hecho que provocó que todas se asustasen.
- ¿De dónde has salido tú? - grito Vic. – ¿Qué quieres, que me de un infarto?
- He estado aquí todo el rato...- respondió Quill.
- ¿Sigues dándole vueltas a eso?- preguntó Aki dejando salir suspiró. - Te digo que podía haber ido al bosque.
- Pero a ver… ¿de qué habláis? – dijo Vic con el ceño fruncido.
- Te digo yo que no estaba, cuando estábamos de vuelta al pueblo vi un collar y te juro que ponía Pierre.- refunfuñó Quill sentándose junto a las demás.- Javi Javi Javi Javi, cuéntalo tú.
- ¡¡Lo queréis contar ya!! – espetó Vic con una gran curiosidad. Javi miró a Quill y con un suspiro empezó a contar lo que tanto intrigaba a las demás.
- Pues resulta que íbamos por el camino, y entonces entre los árboles, Quill vio una cosa blanca como un conejo… -
- Tenía más cara de gato. – interrumpió Quill.
- Ahora que lo pienso… si… la verdad tenía cara de ga… - dijo Javi después de cavilar un rato.
- ¡Sigue contando la historia! – urgió Vic entre risas.
- Claro, claro, ¿en que estaba? ¡Ah sí! ¡El ganejo del camino! – exclamó Javi.
- ¿Ganejo del camino? – preguntó Quill enarcando una ceja.
- Pues… si, es que como no sabemos si era un conejo o un gato…- Javi se encogió de hombros y las chicas se rieron.
- Bueno, bueno, pero, ¡¿podrías proseguir la historia?!- replicó Mooney con impaciencia.
- Ay sí, lo siento, lo siento. Pues resulta que Quill y yo decidimos acercarnos, para verlo mejor. Pero cuando nos acercamos, el ganejo ya se había ido… Pero había algo más interesante aun… -.Javi sonrió misteriosamente, y estalló en carcajadas malévolas. Mooney tomó a Javi por los hombros y la zarandeó mientras le gritaba que continuara contando la historia.
- ¡Ahhhh! ¡Ya cálmate! ¡Que ya sigo contando! – gritó Javi mientras Quill, Vic y Akira se partían de risa.
- Más te vale – refunfuñó Mooney mientras se apartaba de la chica.
- Resulta que había un collar, que según Quill decía Pierre… - prosiguió Javi.
- No digas “según Quill”, estoy segurísima que decía Pierre. – dijo la aludida con el ceño fruncido.
- No lo sé… - dijo Javi mirándola.
-¡¿Pierre?! ¡Así se llama el perro de…! – exclamó Mooney dando saltitos.
- Samuel… - completó Aki.
Las chicas se miraron entre ellas con cierto nerviosismo. El collar de Pierre estaba tirado en el bosque… ¿quizás se le había perdido? ¿Se le había caído de repente? ¿O le había sucedido algo más… siniestro?
James carraspeó incomodo. Las chicas dieron un respingo y lo miraron sorprendidas. Habían olvidado por completo su presencia. Vic se puso de pie en un salto, seguida rápidamente por las demás chicas.
- Ehh… deberíamos ir a comer algo, ¿no te parece James? – dijo Vic con tono nervioso mirando al chico.
- Claro… - dijo James confundido.
Mooney estaba roja como un tomate y las chicas sentían que habían hablado demasiado. No sabían qué tan confiable podía ser el chico nuevo. No es que pensaran que fuera un agente de la FBI contratado por Samuel, pero perfectamente podría pregonar por toda la escuela lo que habían hablado. No era gran cosa, pero podría traerles más problemas con Samuel… y era lo que menos necesitaban en ese momento.
***Victoria Luna Potter***
